Añoro los días perdidos de vidas tranquilas y agrestes en pueblos vivos y alegres con castaños ya vencidos. Añoro las alegres montañas por blancos neveros coronadas y de claros ríos circundadas de verdes juncos y de cañas. Los bosques prietos y las cabañas que a los pastores refugiaban. De los montañeros las hazañas que cuando […]