No te resignes a ser
un mero espectador
de la vida.
A dejar pasar la vida
sin actuar,
sin vivirla.

No te resignes a no ser nadie,
a no conseguir tus sueños,
a no realizar tus deseos,
a no vivir tu vida.

No te dejes dominar
por los demás,
por la indolencia,
por la impotencia,
la desgana,
el miedo…

No te dejes dominar
No te resignes.
Lucha por tu existencia.

¡Sé tú mismo!
Ahora estás a tiempo.

¡Intentarlo!
Nunca es demasiado tarde
Mientras vivas.

No te dejes morir
sin ser tu,
sin que te des cuenta
que tu vida se acaba
sin vivirla.
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