La envidia ciega los ojos,
el rencor consume las almas
y el resentimiento las entrañas
de gentes desesperadas
que mienten y que engañan.
Diferentes formas de violencia
hacen su infame presencia.
Insultos, difamaciones,
mentiras y crispaciones,
agravios con impaciencia
preceden a la indigencia.
Fanatismo e ignorancia
el peligro de gente rancia.
Robos, engaños y muerte
es lo que espera la suerte
en el negro imperio del mal
contra el que hay que luchar.
Es nuestro destino fatal.