Hemos estado en una misa en esta capilla de la Mezquita Catedral de Córdoba. Esta capilla está dentro del recinto, en una esquina de la última ampliación de la mezquita hecha por Almanzor. Es la sede de la «Parroquia del Sagrario».
La integración de la Catedral y de las capillas en la estructura de la antigua Mezquita es extraordinaria, dotándola de una belleza y dinamismo arquitectónico incomparable. La construcción de la primera fase de la Mezquita se hizo sobre la existente basílica cristiana de San Vicente. Pueden observarse sus restos a través de miradores de cristal existentes en el suelo. Pero también observando las columnas y capiteles corintios de esta parte de la Mezquita, que son provenientes de la antigua basílica cristiana y posiblemente reutilizados de antiguos templos romanos.
Hacía mucho tiempo que no asistía a una misa tan sencilla, bonita, profunda y completa que la oficiada por Don Sebastián en esta bellísima Capilla del Sagrario. Don Sebastián, un cura ya mayor lleno de energía, de sentido entusiasmo y de clarividencia espiritual, que nos habló con naturalidad y espiritualidad del amor de Dios, de la eternidad y del futuro a propósito de comentario del evangelio de san Juan: «Tanto amó Dios al mundo…»
En fin, resultó un regalo, un broche de oro a nuestra visita a la Santa Iglesia Catedral de la Mezquita de Córdoba.